“Todos buscamos placer en la vida, pero ¿qué ocurre cuando el placer se convierte en un tirano que gobierna nuestra mente y nuestras acciones?”
Comprender cómo funciona nuestro cerebro en términos de placer y recompensa es esencial para abordar la adicción. Los circuitos de placer no solo nos impulsan a repetir experiencias placenteras, sino que también pueden predisponernos a comportamientos repetitivos y dañinos cuando se pierde el equilibrio natural del cerebro. Este desequilibrio altera las emociones, el razonamiento y el comportamiento, transformando la vida de una persona de manera profunda (Martínez, 2021).
Según Romero y Valenzuela (2020), las estructuras cerebrales como la corteza prefrontal, el núcleo accumbens y el sistema límbico, que conforman el sistema de recompensa, son responsables de las sensaciones de placer y motivación. Cuando se libera dopamina, experimentamos sensaciones que el cerebro quiere repetir. Pero esta liberación de dopamina no solo ocurre con cosas naturales como la música o el reconocimiento; sustancias como el alcohol y las drogas explotan este sistema, volviéndolo adicto a un placer artificial y destructivo.
El Sistema de Recompensa y las Adicciones
“El placer puede ser tanto nuestro mejor amigo como nuestro peor enemigo”.
Las sustancias adictivas generan una estimulación tan intensa del sistema de recompensa que el cerebro se inunda de dopamina. Pero aquí está el truco: con el tiempo, el cerebro se acostumbra, y lo que una vez fue placentero ya no es suficiente. Se necesita más y más para alcanzar el mismo efecto, un fenómeno conocido como tolerancia (Beck et al., 2019).
Este proceso no solo cambia las estructuras neuronales, sino que también afecta funciones críticas como la toma de decisiones y el control de impulsos. La corteza prefrontal, encargada de ayudarnos a tomar decisiones racionales, se vuelve menos efectiva, y el cerebro prioriza la búsqueda de la sustancia sobre todas las demás actividades importantes. Es por eso que una persona en medio de una adicción puede abandonar sus relaciones, estudios o trabajo, todo por un impulso irresistible.
Comportamiento Psicológico y Tratamiento
“El cerebro en adicción no solo está desequilibrado; está atrapado”.
Las personas adictas suelen presentar problemas como depresión y ansiedad, y su necesidad de consumir se vuelve un impulso incontrolable. Este comportamiento no solo altera su vida, sino que también afecta profundamente su entorno familiar y social. La negación y la racionalización son comunes, haciendo que la persona minimice la gravedad de su situación y perpetúe el ciclo adictivo. Las experiencias significativas, como pasar tiempo con la familia o perseguir metas personales, se desplazan por completo, dejando solo espacio para el deseo de consumir (Mosquera et al., 2022).
El tratamiento de la adicción requiere una intervención integral. Las terapias cognitivo-conductuales se enfocan en identificar y cambiar pensamientos distorsionados, y en proporcionar herramientas para manejar emociones como la ira y la ansiedad. Estas intervenciones buscan restaurar el equilibrio en el sistema de recompensa y fortalecer las conexiones con la corteza prefrontal, devolviendo a la persona el control sobre sus impulsos y decisiones. La recuperación es un proceso arduo, pero cada paso hacia el equilibrio es un paso hacia una vida mejor.
Conclusiones
“El camino hacia la recuperación es desafiante, pero también está lleno de esperanza.”
Comprender el circuito de recompensa y sus efectos nos ayuda a ver que la adicción no es simplemente un problema de fuerza de voluntad. Es un trastorno complejo que afecta el cerebro a múltiples niveles, pero con las intervenciones adecuadas, la recuperación es posible. Si tú o alguien que conoces está luchando contra una adicción, busca ayuda. No es un signo de debilidad, sino un paso hacia la libertad y la restauración del equilibrio en la vida.
“En CETAD 12 Pasos, creemos que cada paso hacia la recuperación es un paso hacia una vida con propósito y equilibrio, donde el cambio es posible y la esperanza nunca se pierde.”
Bibliografía
Beck, A. T., & AA. VV. Traductores varios. (2019). Terapia cognitiva de las drogodependencias. Paidós.
Bendersky, D. M. (2022). Autor: Carlos Benítez Franco.
Gutiérrez Palomeque, T. T. (2021). Revisión documental sobre el consumo de sustancias psicoactivas asociadas con el desempeño de las funciones ejecutivas en adolescentes (Doctoral dissertation, Corporación Universitaria Minuto de Dios).
Martínez, M. F. (2021). Propuesta basada en la Neurodidáctica de una “Caza del tesoro” para tercer curso de la ESO. Editorial Inclusión url: https://books.google.es/books?hl=es&lr=&id=plBBEAAAQBAJ&oi=fnd&pg=PA5&dq=La+comprensi%C3%B3n+de+los+circuitos+de+placer+y+su+relaci%C3%B3n+con+el+sistema+de+recompensa+es+esencial+para+el+estudio+de+las+adicciones
Mosquera, E. L. C., Rodríguez, J. P. P., & Parra, P. M. P. (2022). Tendencias actuales sobre la depresión, factores de riesgo y abuso de sustancias. Journal of American health, 5(1).
Romero Galván, E. E., & Labus Valenzuela, C. G. (2020). Tendiendo puentes entre las neurociencias y la literatura. La didáctica de la literatura en el debate actual: aportes y desafíos.
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